Poesía viene labrada en gotas de lluvia.
Nube fría, la inundación lava-lágrimas...
Fértil palabra sobre una hoja en blanco
catarseando la letanía de los días tristes...
Que chapotea versos por el suelo mojado.
Llega el aguacero bañando tierra y alma.
Es la tronada que me destierra del cerrado
y encerrada entre cuatro paredes húmedas
dejo mi camino cuotidiano de las flores…
Yo ni me quejo, tengo libros en las manos.
Rosemarie Schossig Torres