
Y ya ni sé más si es el poema,
artero, que por el avieso me vira.
O se mi cuerpo entero respira
en verso, donde exhalan dilemas.
En la trilla del decir, el alma precipita.
Todo lo que yo de mi misma oculto,
allá en el jardín del ámago, inculto,
deshojo en rimas, cual margarita.
Ajenas, cisman ventanas abiertas.
En el improviso, al revés, escenario
es que adentra el verso, contrario
camino; nuevas palabras despierta...
En cuanto el verbo me desvenda....
yo, envuelta en encajes alegóricos;
entrelineas veladas, metafóricas,
busco no el fin; pero sí, la senda.
Rosemarie Schossig Torres
artero, que por el avieso me vira.
O se mi cuerpo entero respira
en verso, donde exhalan dilemas.
En la trilla del decir, el alma precipita.
Todo lo que yo de mi misma oculto,
allá en el jardín del ámago, inculto,
deshojo en rimas, cual margarita.
Ajenas, cisman ventanas abiertas.
En el improviso, al revés, escenario
es que adentra el verso, contrario
camino; nuevas palabras despierta...
En cuanto el verbo me desvenda....
yo, envuelta en encajes alegóricos;
entrelineas veladas, metafóricas,
busco no el fin; pero sí, la senda.
Rosemarie Schossig Torres
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